VICENTE GIL
(¿1470 – 1538?)

Nació en Portugal, quizás en Lisboa. Se le  puede considerar escritor binacional y bilingüe: portugués y español, porque vivió en los dos países y escribió con soltura igualmente en las dos lenguas. Desde el punto de vista del drama fue excepcional. Su obra total, tanto poética como dramática, ya sea en español o portugués, es abundante y rica en temas de los más diversos.

En la historia de la dramaturgia española, y al lado de Juan del Encina, se le considera como uno de los iniciadores. Fue un hombre renacentista modelo, pues se entregó a los varios ramos del conocimiento. Se cree que estudió y llegó a ser licenciado en derecho. Fue orfebre, músico, actor, dramaturgo y poeta. Su composición poética se encuentra intercalada en todas su producciones dramáticas.

Desempeñó cargos bien remunerados en la corte portuguesa. Tuvo dos hijos: Luis, que también fue poeta, y Paula, dama de las infantas de la familia real.

Parece ser que la crítica atribuye mucha de su poesía a la tradición oral popular, sin poder distinguir qué es lo que le pertenece al pueblo y qué es de cosecha propia. Pero todos están de acuerdo en que, si tomó elementos del pueblo, los pudo hacer suyos y elevarlos a un nivel de gran escritor.

Su estilo es sencillo, terso y a veces conmovedor. Tiene una gracia inimitable, debido a su  fresca naturalidad.

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